Semana del Uso Prudente de los Antibióticos 2022

Autora: Raquel Carnero Gómez-Farmacéutica y Diplomada en Salud Pública.

Aunque a día de hoy los antibióticos son medicamentos muy útiles, pronto dejarán de serlo si no los usamos bien. Esto es una realidad y es muy grave para un sistema sanitario como el nuestro, que depende de los antibióticos para procedimientos tan importantes como los trasplantes, pero también para prevenir las infecciones bacterianas durante las cirugías y completar tratamientos oncológicos o salvar vidas en neonatología.

Es clave que los ciudadanos comprendan que los antibióticos no son un bien de consumo, sino que son medicamentos que requieren prescripción y que influyen enormemente en la salud pública, es decir, en la salud de todos. Por eso existe la Semana Europea del Uso Prudente de los Antibióticos (del 18 al 24 de noviembre). La concienciación sobre este tema es crucial.

La resistencia a los antibióticos es un fenómeno natural. Se produce cuando las bacterias “mutan” en respuesta al uso de estos fármacos. Adquieren habilidades que les permiten escapar a estos tratamientos. Es importante destacar que son las bacterias y no los seres humanos ni los animales, las que se vuelven resistentes a los antibióticos. Estas ‘bacterias multirresistentes’ pueden causar infecciones en el ser humano y en los animales y esas infecciones son mucho más difíciles de tratar que las no resistentes. Una infección resistente puede hacer que el enfermo muera o que tenga que pasar más tiempo en una UCI o con una vía de administración intravenosa. Un tratamiento antibiótico conlleva una prescripción por parte de un médico.

Además, la OMS advierte que la resistencia a los antibióticos es hoy “una de las mayores amenazas para la salud mundial, la seguridad alimentaria y el desarrollo”. Por lo tanto, es importante conocerlos un mejor y utilizarlos correctamente, es decir, solo cuando se han prescrito y de la manera en que se han prescrito, con la duración y pauta de administración correspondiente. De ahí que se emplee el término “uso prudente”, porque no se trata de dejar de utilizarlos, sino de frenar el abuso.

Las bacterias viajan con nosotros y son capaces de transmitirse información entre ellas. La rapidez con la que se expande la resistencia a antibióticos por todo el mundo da idea de que este problema no entiende de fronteras entre países ni continentes. Al igual que en el caso de la reciente pandemia por COVID-19, la resistencia a antibióticos se ha visto favorecida por la facilidad de expandirse.

Dado que trata de un problema global que afecta a la salud pública y animal, las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Comisión Europea (CE) indican que para tener éxito en la lucha contra las bacterias resistentes se requiere un planteamiento global y multidisciplinario que abarque medioambiente, alimentación, salud animal y veterinaria.

Se lleva años trabajando en la aplicación de la legislación en cada país, para evitar la dispensación inadecuada de antimicrobianos tanto en el sector de la salud humana como en el veterinario, pero no todos los países han conseguido el mismo nivel de éxito en la implementación.

Entre otras acciones encontramos:

  • Prevenir y controlar las infecciones relacionadas con la atención sanitaria, es decir, mayoritariamente las que ocurren en el entorno hospitalario.
  • Elaborar y aplicar recomendaciones nacionales sobre el tratamiento de personas y animales con antibióticos que garanticen un uso responsable y racional, reduciendo la prescripción innecesaria y el autoconsumo.
  • Promover que los tratamientos con antibióticos se basen en el diagnóstico microbiológico y en la realización de antibiogramas.
  • Fomentar la salud animal mediante la prevención de enfermedades y la mejora de las medidas de higiene y, como resultado de todo ello, favorecer la reducción de la necesidad de uso de antibióticos.

Luis Marcos y Raquel Carnero, ambos farmacéuticos por la Universidad de Salamanca son los autores de ‘Antibióticos vs Bacterias. De la resistencia al contraataque’ (Larousse). Ambos cuentan con experiencia en la divulgación científica desde que publicaran Vacunando. ¡Dos siglos y sumando!, un libro editado por la Universidad de Salamanca centrado en llevar la información acerca de las vacunas al público general y en el caso de Luis, los libros de la serie Epopeya farmacéutica, también publicados por la USAL, en los que se adentra en la historia de la farmacia.

Antibióticos vs Bacterias. De la resistencia al contraataque’ (Larousse) es un libro divulgativo ilustrado por Ansola en el que trata este grave problema de salud pública que mucha gente desconoce. Está orientado a un público de todas las edades y las ilustraciones aportan un toque de humor, sin perder el rigor científico. Prologado por el catedrático de microbiología de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, Víctor Jiménez Cid, cuenta además con un epílogo escrito por el catedrático de parasitología de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Salamanca, Antonio Muro.